Pastor de Laredo ministra a inmigrantes y deportados
LAREDO—Lorenzo Ortiz, el pastor de Iglesia Bautista Emmanuel en Laredo, cree que Dios abrió sus ojos para ver las necesidades de otras personas y eso lo llevo a ministrar a inmigrantes en la frontera del sur de Texas y Tamaulipas.
Desde el 2017, Ortiz a ministrado a inmigrantes—primero empezó trabajando con gente que había viajado desde Cuba hasta Nuevo Laredo y recientemente con inmigrantes indocumentados de México que han sido deportados de Estados Unidos.
El trabaja con el apoyo de su familia—principalmente el de su hija, Ruth, y su hermana Micaela—así como el de su iglesia y otras congregaciones en Laredo y Nuevo Laredo.
Ministrando a Cubanos en Nuevo Laredo
Un entrenamiento evangelístico dado por Texas Baptists hace algunos años en Laredo, abrió los ojos de Ortiz para ver otras formas de compartir las buenas nuevas.
Cuando el presidente Obama termino la póliza de ‘pies secos, pies mojados,’ la cual le daba residencia a cualquier persona cubana que llegara a tierras estadounidenses, muchos cubanos decidieron entrar a Estados Unidos por medio de la frontera con México.
Una docena de iglesias en Nuevo Laredo dieron alojó a cubanos en sus santuarios y les dieron desayuno y almuerzo todos los días. Ortiz orquesto el trabajo con esas iglesias, las cuales incluyen cuatro iglesias bautistas.
Atendiendo a inmigrantes deportados
Últimamente, Ortiz hace su ministerio con inmigrantes indocumentados mexicanos, quienes han sido deportados de Estados Unidos.
“Laredo es la frontera por donde sale el 60 por ciento de los inmigrantes deportados, y ese numero va a incrementar,” dijo Ortiz.
“Ya lo que pasamos aquí son situaciones donde se nos dificulta proveer comida y hospedaje a las personas que están aquí.”
Mas de 150 deportados llegan a Nuevo Laredo cada día, y les puede tomar un par de días en encontrar una manera de regresar a casa, remarco Ortiz.
La mayoría de la iglesias en Nuevo Laredo que trabajaron con inmigrantes cubanos ahora ayudan con los inmigrantes deportados. Las iglesias trabajan con mas de 300 deportados cada día, Ortiz dijo.
Ortiz encuentra alojamiento para inmigrantes, ayuda a que los deportados obtengan documentos, y los conecta con agencias para que puedan regresar al estado de donde vinieron.
Evangelismo encarnacional
Pero el ve que su servicio es mas que una acción social. El ve esto como un evangelio encarnacional—el estar con personas en su sufrimiento, en su búsqueda por esperanza y su deseo por justicia.
“Hay una gran diferencia entre compartir el evangelio solo con palabra y lo que es vivir sus experiencias,” Ortiz dijo. “Hay un impacto, a diferencia de solo dar información.”
Así como las personas han dejado sus hogares, sus familias y posesiones con la ilusión de encontrar mejores oportunidades, Ortiz dice que la iglesia tiene que entonces imitar a Cristo y caminar con la gente en su búsqueda de esperanza.
Ministerio del Rio se ha comprometido a dar fondos de asistencia y donar accesorios de cocina para que la iglesias tengan mas facilidad en preparar los alimentos que sirven. First Baptist Church de Missouri City, cerca de Houston, también da ayuda financiera a este ministerio.
Pero las congregaciones cerca de la frontera todavía necesitan mas ayuda, especialmente si el numero de deportados va a incrementar, Ortiz dijo.
Centros de detención en Laredo
El ministerio empieza cuando los que van a ser deportados llegan a uno de los centros de detención en el área, Laredo Processing Center y Rio Grande Processing Center—los cuales son operados por compañías privadas.
En un reporte publicado a mediados de diciembre, la oficina del inspector general del Departamento de Seguridad Nacional notó varios problemas en cuatro de las cinco facilidades en donde se hicieron inspecciones inadvertidas.
Aunque el Laredo Processing Center obtuvo buenos resultados en la inspección, hubo otras que fueron citadas por el trato inapropiado que se daba a reclusos y la demora con la que se daba atención medica—una de esa facilidades esta localizada en Georgia y operada por la compañía que maneja Laredo Processing Center, CoreCivic.
GEO Group, la compañía que maneja Rio Grande Detention Center, tiene varias demandas en su contra por el supuesto maltrato a prisioneros en el centro que esta en Colorado y denuncias de derechos civiles respecto a el abuso en otros de sus centros.
En el reporte del año pasado, la oficina del inspector general recomendó al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en ingles) aumentar su vigilancia en los centros de detención y dar mas atención a los operativos de esos centros, después de las quejas que han dado los grupos de derechos del inmigrante y los detenidos.
“CoreCivic esta comprometido a proveer un ambiente seguro, humanitario y apropiado para los que has sido puestos bajo nuestro cuidado, mientras también damos soluciones rentables a los desafíos que nuestros socios en el gobierno enfrentan,” dijo Jonathan Burns, el director de asuntos públicos de la compañía. “Trabajamos cerca de nuestros socios en ICE para asegurar el bienestar de los detenidos en nuestros centros de detención, los cuales tienen un contrato con ICE.”
Los administradores de servicio de ICE, quienes trabajan de tiempo completo en los centros, “tienen acceso total en las facilidades y con los detenidos, y se reportan independientemente al cuartel general de ICE,” añadió Burns.
Ortiz hablo de haber escuchado reportes de los detenidos en Rio Grande Detention Center en los que hablan del maltrato que sufren ahí. GEO Group, no respondió a Baptist Standard cuando fue contactado al respecto.
“Se sienten rechazados”
Después de que ICE deja a los deportados en la frontera, ellos cruzan a Mexico y van al Instituto Tamaulipeco para los Migrantes. En la agencia estatal, Ortiz les ayuda con ropa, paquetes de higiene, y a encontrar una manera de regresar a casa.
“Cuando cruzan la frontera, ellos se sienten arruinados. Ellos se sienten rechazados,” dijo Ortiz.
Muchas veces, el significado de regresar al estado de donde salieron es regresar a nada, Ortiz noto. Sus familias ya no están ahí, ya no tienen hogares, y regresan como extranjeros.
“La iglesia tiene que ser responsable por lo que pasa en la comunidad,” Ortiz enfatizo. “La iglesia tiene que dar soluciones a los problemas de la gente.”
Si las personas se sienten en la oscuridad, la iglesia es responsable de darles la luz de Cristo, el insistió.
Las necesidades son muchas, y un escaso numero de iglesias están buscando responder con recursos limitados, menciono Ortiz. Pero las congregaciones confían que Dios engrandecerá sus esfuerzos, el añadió.
“Dios es el que siembra, y Dios es el que da crecimiento,” el dijo.
Ortiz desafío a otras congregaciones a involucrase mas en el ministerio a deportados.
“Solo tienen que salir y mirar la necesidad que esta alrededor de ellos,” el dijo.
Mientras la iglesia se acerca mas a Dios, también se acerca mas a las necesidades de otros, dijo Ortiz. El recalco las palabras de Jesús en Mateo 25 como su guía—el ministerio tiene que ser a los mas vulnerables, las personas con las que Cristo se identifica.
“Nos damos cuenta que Dios no esta trabajando en nuestros ministerios, pero que nosotros estamos trabajando en el ministerio de Dios,” Ortiz dijo.